Toyota Yaris 120H Style 2021: prueba a fondo

Toyota Yaris 120H Style 2021: prueba a fondo

Índice
  1. ¿Espacioso?
  2. Dos pedales y un volante
  3. Noble, aunque seas un bárbaro
  4. Veredicto

Hace un ao, Toyotarenov casi por completo su Yaris, un modelo que sigue apostando por la hibridacin como la solucin mecnica ideal. Ha mejorado frente a su antecesor, pero es el urbano ms recomendable del momento?

Hace ya más de 20 años que Toyota presentó su primer híbrido, el Prius. Aquello fue una revolución tecnológica, pero es ahora cuando este tipo de mecánicas está viviendo su auténtico boom en ventas.

En el caso del Yaris, su modelo urbano, la mecánica híbrida apareció en 2012. Y, teniendo en cuenta que es precisamente en los recorridos urbanos donde estas mecánicas mejor se defienden, es normal que el actual Yaris vaya a basar todas sus ventas prácticamente en la variante híbrida.

El Yaris de esta cuarta generación es un urbano de cinco puertas y 3,94 metros; una longitud unos 10 cm más corta que la de muchos de sus rivales. Ahora cuenta con una estética más atractiva y atrevida pero, en la práctica, sigue manteniendo la misma filosofía que su antecesor.

Lo mismo ocurre con el interior, con un salpicadero de nueva factura que, aunque quizá no sea especialmente rompedor, pero cumple desde el punto de vista ergonómico y práctico. Así, en el Yaris encontramos suficientes botones para la mayoría de los sistemas. Cuenta con una pantalla central para la radio o el teléfono, pero no es demasiado compleja de utilizar y el climatizador cuenta con sus propios botones.

Por su parte, la instrumentación tiene un aspecto moderno pero sencillo. Ofrece la información suficiente y resulta bastante clara. Nada que objetar. En cuanto a los acabados, este Toyota tiene las peculiaridades habituales de los coches fabricados en Japón: están bien ajustados, pero no parecen darle tanta importancia al empleo masivo de plásticos duros (y eso que, en el Yaris, la plancha superior es más blandita), remates mejorables (como las rebabas que hay en el mando interior de apertura de las puertas) o detalles excesivamente espartanos, como la sencilla moqueta que emplea en la cara interna del portón del maletero en lugar de plástico o la sensación que transmiten las puertas traseras al cerrarlas, que parecen menos sólidas que las de otros rivales europeos. Aun así, está bien hecho y tiene pinta de soportar muy bien el paso del tiempo.

Eso sí, hay algunos detalles que deberían mejorar: la iluminación interior es mejorable: sólo hay un plafón con dos bombillas que no son de led, la guantera está sin forrar...

¿Espacioso?

Si hablamos del puesto de conducción, los asientos tienen un aspecto deportivo y son de serie en este acabado. Además de sujetar bastante bien, son cómodos. La postura no plantea grandes problemas para encontrarse a gusto enseguida. Las plazas traseras están bien por altura y cumplen por espacio para las piernas, pero la anchura es un tanto escasa, quedando levemente por debajo de la media del segmento. Además, el hueco de la puerta también podría ser un poquito más amplio a la altura de los pies para facilitar el acceso.

El maletero tiene 286 litros, que no es poco para tratarse de un modelo con mecánica híbrida. Eso sí, se queda un poco por debajo de rivales como el Ford Fiesta, el Citroën C3, el Seat Ibiza o el Opel Corsa, que pasan de 300 litros, la capacidad . De serie lleva un kit reparapinchazos, con pequeños compartimentos para dejar objetos bajo el suelo del maletero.

Dos pedales y un volante

En el apartado mecánico, el Yaris 120H sigue recurriendo a la combinación de un motor de gasolina y otro eléctrico, sin una caja de cambios como tal. Eso hace que, en la práctica, nos podamos olvidar tanto de la caja de cambios como del embrague, convirtiéndose en un coche muy sencillo de conducir en ese aspecto.

El motor de gasolina ahora es un 1.5 de tres cilindros y 91 CV, mientras que el eléctrico, que es capaz de mover al coche a baja velocidad y durante 2 ó 3 km, desarrolla 80 CV. En conjunto, y dado que las potencias no se suman, el Yaris entrega una cifra de 116 CV, más que suficiente para las pretensiones de este coche tanto en ciudad como en carretera.

Lo bueno de esta mecánica híbrida, además de su facilidad de uso (recordemos que las baterías se recargan durante la conducción o en las frenadas, por lo que no hay que enchufarlo), es lo poco que consume sobre todo en ciudad. Ahí, no es difícil ver medias reales de menos de 4 litros/100 km, mientras que en recorridos interurbanos es fácil situarse por debajo de los 4,5 L/100 km.

En carretera, la cosa cambia: por autopista a alta velocidad sostenida, lo normal es moverse en torno a 5,5-6 L/100 km, que tampoco está nada mal... aunque, en este caso, un diésel seguiría siendo mejor alternativa, si bien cada vez son menos las marcas que ofrecen urbanos con ese tipo de mecánica.

Las pegas de este motor siguen estando en el ruido. O, más que en el ruido, que ya no es tan elevado, en el sonido. En ciudad o a velocidad sostenida, ha mejorado una barbaridad, si bien es cierto que, a alta velocidad, el sonido del motor se ve camuflado por el ruido de rodadura y aerodinámico, que es bastante elevado... El verdadero problema sigue estando en las carreteras secundarias donde le exijamos un poco de alegría, pues es entonces cuando el propulsor de gasolina se muestra demasiado ruidoso al entrar en funcionamiento.

Noble, aunque seas un bárbaro

En cuanto al comportamiento, el Yaris sigue obteniendo una nota excelente. Tiene una suspensión blanda, y eso hace que se aprecien más movimientos de la carrocería en fuertes apoyos que en muchos de sus rivales. La parte buena es que, en zonas bacheadas, tiene una capacidad para filtrar las irregularidades muy buena, de manera que mantiene bien la trayectoria aunque los baches sean pronunciados. Y, por supuesto, es un coche muy cómodo.

Independientemente de eso, el Yaris ofrece una capacidad de agarre asombrosa para un simple urbano, en parte ayudado por su buen reparto de pesos y su bajo centro de gravedad debido a la presencia de las baterías bajo los asientos traseros. Además, es ligero: 1.085 kilos. El aplomo es notable, e incluso conduciendo al límite de sus posibilidades, sus reacciones son siempre muy nobles y seguras.

A esa sensación real de control también ayuda una dirección precisa y de bastante buen tacto, además de unos frenos que cumplen también con suficiencia para la filosofía del coche.

Veredicto

El Yaris sigue siendo un modelo urbano que convence precisamente si se va utilizar ahí, en la ciudad y alrededores. Además, no hay otro rival híbrido 'de verdad' por menos dinero, y eso que este Yaris viene bien equipado de serie. Podría ser más amplio (aunque también tendría que ser más grande por fuera), menos ruidoso en carreteras secundarias y cuidar un poco más algún detalle interior de acabado pero, en general, es un muy buen coche que nos ha convencido plenamente.

 



Fuente: https://www.autofacil.es/toyota/yaris/2021/03/31/fondo-toyota-yaris-120h-style/61642.html

¿Te sirvió la información?

Si quieres conocer otros artículos parecidos a Toyota Yaris 120H Style 2021: prueba a fondo puedes visitar la categoría Toyota.